jueves, 28 de noviembre de 2013

Tarima Multicapa Layle

TARIMA MULTICAPA


La tarima multicapa se presenta en una estructura única: Una base de tablero contrachapado con colas fenolicas aporta estabilidad y permite su presentación en formatos muy anchos, y una capa de madera noble que otorga la apariencia de un suelo de madera maciza.





La capa noble de la tarima multicapa puede ser de diferentes especies de madera, roble, wengue, iroko, fresno, nogal, sucupira... y permite al mismo tiempo una amplia variedad de acabados a gusto del consumidor.

El ancho de las lamas varían desde 160 hasta 300 mm aprox. y en espesores desde 15 hasta 20 mm, esta tarima multicapa es compatible con instalaciones de calefacción radiante.






Entre los acabados podemos destacar los cepillados, biselados, tintados... a los que se aplica capas protectoras de aceites o variedades de barnices: mates, brillantes, satinados, con efecto aceite...

Esta gama ofrece multitud de posibilidades a la hora de decorar tu espacio, pudiendo darle un aire vintage, moderno o tradicional.






miércoles, 20 de noviembre de 2013

La madera en todos los SENTIDOS - Parte 5 - Fragancia de madera

Siempre hemos percibido la madera mediante la vista, el tacto y, en ocasiones, el olfato. Pero si profundizamos un poco más podremos apreciar la madera incluso con el oído y el gusto.

EL OLOR DE LA MADERA

Algunas maderas producen un olor característico al cortarse. El aroma puede ser efímero o muy duradero y la intensidad de la fragancia dependerá del lugar de crecimiento del árbol.



Los aromas de las madera son parte del sexto grupo de aromas, donde podemos encontrar los aromas amaderados de tonos cálidos, dulces y resistentes. Estos característicos aromas proceden de los árboles que destilan esencias de fragancias densas.

Algunos árboles como el pino, cedro, ciprés, palo santo y sándalo, desprenden olores fragantes y se extraen aceites esenciales de los que emanan aromas conocidos desde la antigüedad y a los que se les atribuye propiedades concretas.


Actualmente muchos perfumes, tanto masculinos como femeninos, contienen aromas de madera. 

Las fragancias a madera masculinas mezclan  cedro, vetiver y sándalo. A menudo, estas fragancias se ven alteradas por una cálida pincelada de almizcle, un fresco toque de musgo de roble o envueltas por el aroma a cuero. En cambio, las fragancias a madera femeninas son de naturaleza almendrada y especiada con aromas a ámbar, sándalo, cedro y un toque de pachuli. Algunas mezclas de maderas presentan una pincelada de canela, un toque de tierra o una bocanada de tabaco.